Los exiliados cubanos en España denuncian que el Gobierno sigue sin
concederles el asilo político
España
El Gobierno español anunció el pasado fin de semana a bombo y platillo
la conclusión del proceso de liberación de presos políticos y de
conciencia en Cuba después de la excarcelación de 115 opositores, de los
que 103 han viajado a España junto con 647 familiares. Sin embargo,
según denuncian los propios disidentes a Sí, ninguno de ellos ha
recibido aún el asilo político.
"El Gobierno español está violando lo que establece la Constitución: que
a los seis meses y un día de ser solicitado, el asilo debe estar
otorgado. Así es imposible trabajar. Nadie da trabajo a un exprisionero
político cubano indocumentado", dice Julio César Gálvez, el primer de
los disidentes que llegó, en julio de 2010.
"La Comisión Tripartita, compuesta por el Ministerio del Interior, el
Ministerio de Trabajo, el Ministerio de Exteriores y Cooperación y
Acnur, se reunió y acordó el pasado mes de febrero, en mi caso, conceder
el asilo político a mi familia, pero el ministro Alfredo Pérez Rubalcaba
aún no ha firmado la resolución", explica Gálvez.
"Nos trajeron y, después, sálvese el que pueda", afirma con amargura
este exiliado cubano residente en Madrid.
El limbo jurídico en el que los disidentes en España no es el único
problema de estos cubanos, quienes también denuncian que, al contrario
de lo que les prometió el Gobierno de Fidel Castro antes de llegar a
este país, no les ha reservado sus viviendas en la isla.
"El Gobierno cubano prometió respetar las viviendas de los presos
políticos desterrados hacia España, pero, desde hace más de un mes, este
acuerdo, que fue verbal, se vino abajo. Incluso algunos de nuestros
familiares que habían quedado en Cuba viviendo en nuestras casas han
sido sacados de ellas bajo presiones y promesas futuras", dice Juan
Francisco Marimón, exiliado en Elche.
"La mía no está habitada por mala gente", afirma Marimón, quien, aun
así, reclama al Gobierno cubano la devolución de la vivienda a sus
familiares.
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