Disidentes de Cuba confían en fortalecimiento de Damas de Blanco
Juan Carlos Chavez
jcchavez@elnuevoherald.com
La muerte en La Habana de Laura Pollán, líder de las Damas de Blanco,
madres y esposas de presos políticos, causó un profundo dolor dentro y
fuera de la isla y abrió interrogantes sobre el futuro del colectivo
femenino.
Pero a poco más de una semana del sorpresivo fallecimiento de Pollán, a
los 63 años, víctima de un paro cardíaco causado por una neumonía viral
y diabetes, los cuestionamientos han ido dando paso a la certeza de que
el movimiento pudiera salir más fortalecido.
Oscar Elías Biscet, el más importante de los opositores en Cuba, dijo
que el ejemplo que dejó Pollán en las filas del grupo será determinante.
"Les dará más fuerza a este movimiento. El pueblo cubano debe tomar en
sus corazones y mentes todas las palabras y el ejercicio democrático que
hizo esta gran mujer. Si lo hacen, veremos libre a Cuba", apuntó.
El tema de la sucesión del liderazgo nunca llegó a ser un problema en
las filas de las Damas de Blanco. Tampoco la continuidad y validez de su
causa humanitaria tras la liberación de los 52 presos restantes del
llamado Grupo de los 75, disidentes detenidos en una ola represiva y
cuya libertad ellas exigían desde el 2003.
En el último año, las peticiones de las Damas de Blanco y Pollán
forzaron al gobierno de Raúl Castro a negociar con la Iglesia Católica
las excarcelaciones, así como las de otros 65 detenidos en otras
ocasiones. Uno de los que dejaron la prisión fue el esposo de Pollán,
Héctor Maseda.
Al asumir las riendas la portavoz de las Damas de Blanco, Berta Soler,
de 48 años y esposa del ex preso Angel Moya, se anuló la posibilidad de
que se genere un caos dentro de la agrupación por la ausencia de una
figura serena pero de fuertes convicciones como Pollán.
Mientras tanto, las mujeres reafirmaron su intención de continuar
exigiendo la excarcelación de otros cientos de presos de conciencia en
la isla. Incluso informaron que podrían ampliar los objetivos para
luchar contra todas las violaciones de los derechos humanos.
Ninoska Pérez Castellón, periodista de Radio Mambí y miembro del Consejo
por la Libertad de Cuba, dijo que los pasos de las Damas de Blanco son
firmes debido a la valentía y dedicación de sus integrantes.
"Todas saben que tienen la responsabilidad de seguir luchando por los
presos y los derechos humanos", sostuvo Pérez. "Una causa es
consecuencia de la otra, y en estos ocho años, su conciencia social y
política indiscutiblemente han crecido".
En un país cuyo régimen no ha mejorado su historial de libertades
individuales y prefiere apostar por aumentar drásticamente las
detenciones y los operativos de vigilancia para silenciar al pacífico
movimiento opositor, la permanencia de las Damas de Blanco a un nivel
más alto parece estar más que garantizada, según opositores dentro de la
isla.
Desde Santa Clara, el disidente Guillermo Fariñas, Premio Sajarov del
2010 de la Unión Europea, consideró que el futuro de las Damas de Blanco
está consolidado. Dijo que en ningún momento perderán su razón de ser.
"Obviamente el trabajo de Soler no será fácil", comentó Fariñas. "El
oficialismo castrista se va a concentrar en una ofensiva para
desalentarlas pero los planes de ella son muy claros: continuar en la
lucha, algo que la misma Pollán pidió cuando ya se sentía bastante enferma".
En un intento por dificultar la reorganización del grupo, el gobierno
cubano ordenó a comienzos de semana el arresto de al menos 20 miembros y
simpatizantes de las Damas de Blanco. El objetivo era evitar que
participaran en un "té literario", donde se analizaría la reorganización.
Elizardo Sánchez Santa Cruz, director de la Comisión Cubana de Derechos
Humanos y Reconciliación Nacional (CDHRN), precisó que el futuro de las
Damas de Blanco surge al paso de la coyuntura actual.
"Es un movimiento que cuando estaba Pollán ya tenía un espectro de
demandas amplio, un movimiento feminista por la liberación de los presos
y los derechos fundamentales. Soler lo ha reiterado una vez más", dijo
Sánchez. Sin embargo explicó que el tema de la seguridad debe ser
tratado con mucho cuidado porque el gobierno cubano les tiene
"animadversión".
Sánchez junto a otros seis disidentes firmó el miércoles una declaración
conjunta enfatizando sus sospechas sobre la muerte de la fundadora de
las Damas de Blanco. Dijeron que no quieren ser enviados a ningún
hospital del gobierno sin la aprobación previa de un médico de
confianza. Los siete cubanos que emitieron una declaración conjunta como
miembros de la Alianza Democrática Cubana (ALDECU), escribieron que su
decisión se debió a la "intempestiva" muerte de Pollán el 14 de octubre.
Además de Sánchez, la declaración fue firmada por los ex presos
políticos José Daniel Ferrer García y Héctor Palacios, y los disidentes
Guillermo Fariñas, René Gómez Manzano, Iván Hernández y Gisela Delgado.
"Recuerda que durante muchos meses lanzaron turbas violentas para
agredirlas verbal, física y sicológicamente. Esa violencia se mantiene y
deben tomar en cuenta la trágica experiencia que sufrió Pollán, su líder
histórica", añadió Sánchez desde La Habana.
Pollán fue la habitual anfitriona de las Damas de Blanco durante sus
reuniones y "té literarios" un martes al mes. Las actividades se
realizaban a puertas cerradas y las integrantes y simpatizantes hablaban
de sus familiares encarcelados. A veces se leían en voz alta las cartas
enviadas desde la cárcel.
Las Damas de Blanco surgieron al calor de la Primavera Negra del 2003,
una oleada represiva contra líderes del movimiento disidente y
activistas de derechos humanos, periodistas y bibliotecarios
independientes. Las mujeres, identificadas por su habitual vestimenta
blanca, transformaron la escena opositora callejera a pesar de sufrir
constantes actos de hostigamientos y ataques de fuerzas progubernamentales.
Todos los domingos asisten a una misa en la Iglesia de Santa Rita, en el
barrio de Miramar, y luego marchan pacíficamente con gladiolos en las
manos por la Quinta Avenida. Es el único grupo opositor tolerado por el
gobierno en las calles.
Nancy Pérez Crespo, fundadora de la agencia Nueva Prensa Cubana (NPC),
manifestó que la firmeza y tónica del grupo se mantendrá. Recordó que
Soler fue la más cercana a Pollán y una de las primeras que
consistentemente rechazó el rumor sobre un posible desmantelamiento del
colectivo femenino tras la excarcelación de los restantes del Grupo de
los 75. Pollán y Soler también exhortaron a los familiares de otros
prisioneros, conocidas ahora como Damas de Apoyo, a que se sumen al grupo.
"Creo que ellas van a mantenerse, inclusive tras la muerte de Pollán.
Todo esto les va a servir de acicate para seguir", dijo Pérez Crespo.
"El gobierno cubano está jugando al duro y las están maltratando pese a
que ellas son Premio Sajarov".
La agrupación es ganadora del Premio Sajarov 2005 del Parlamento
Europeo. También recibió en abril del 2010 el galardón de Derechos
Humanos del Departamento de Estado. En octubre de ese año se le concedió
el Premio a la Libertad del Consejo del Atlántico de la OTAN, con sede
en Bruselas.
Silvia Iriondo, representante de Madres y Mujeres Anti-Represión (M.A.R.
por Cuba), radicado en Miami, afirmó que el coraje de las Damas de
Blanco continuará siendo un elemento importante de cohesión.
"En términos organizativos, Laura Pollán era un gran elemento
aglutinador", sostuvo Iriondo. "Pero me parece que Soler y las otras
mujeres han demostrado muchas veces su coraje para continuar ese legado".
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