[23-02-2012]
Lucas Garve
Fundación por la Libertad de Expresión
(www.miscelaneasdecuba.net).- La reunión habitual de los miércoles de la
Red Cubana de Comunicadores Comunitarios que tiene por sede el pequeño
apartamento de Marta Beatriz Roque Cabello fue impedida por los enemigos
de la razón y el mejoramiento humano, el miércoles 15 de febrero.
Cuando se dirigían a la sesión de la Red el día citado, los miembros
José Díaz Silva, su esposa Lourdes Esquivel Vieyto, en unión de uno de
su hijo Ernesto Díaz Esquivel y la esposa e hija pequeña de él, fueron
interceptados por agentes del DSE al descender de un ómnibus P 2 en
Lacret y Figueroa a las 11 am. José Díaz Silva fue esposado y conducido
a la estación de Aguilera y después a la estación de policía del Reparto
Capri de dónde lo liberaron a las 9 y 20 pm.
A Arnaldo Ramos Lauzurique lo detuvieron en Luís Estévez y Cortina y lo
condujeron en un auto patrulla a su casa; a Miladys Carnel Rodríguez,
Ibis Rodríguez González y Fermín Zamora Vázquez los detuvieron en Lacret
y Figueroa, los montaron en un ómnibus estatal y los soltaron en la
rotonda de Guanabo. A Noslien Quicutis Gómez, Norlei Quicutis Gómez y
Javier Jiménez Hernández los detuvieron en la calzada de 10 de octubre y
fueron conducidos para Centro Habana donde residen.
La policía política del régimen comunista pudo imposibilitar la sesión
del miércoles 15 del mes actual, pero no pudo obstaculizar que el mundo
entero conociera el desafuero de las autoridades policiales contra una
decena de comunicadores comunitarios, quienes desarrollan una labor
humanitaria en sus comunidades porque ayudan a sus vecinos a expresar
sus casos sociales.
Estos ciudadanos que no son escuchados, que no tienen voz porque no los
muestran en el Noticiero Nacional de la Televisión cubana como no
clasifican como "logros" de la Revolución, sino todo lo contrario,
encuentran en las comunicaciones de la Red la vía expedita para dar a
conocer su situación difícil.
Además las tareas de los miembros de la Red Cubana de Comunicadores
Comunitarios no se detiene en la labor mencionada. También se estudian
casos sociales tan difíciles causados por injusticias jurídicas, se
estudian sus expedientes y se ha llegado hasta representar jurídicamente
a estas víctimas del mal trabajo de los tribunales que mal administran
la justicia en Cuba.
Asimismo, los miembros de la Red se ocupan en sus comunidades en ayudar
materialmente a familias en situaciones económicamente muy precarias y
se organizan actividades con niños de zonas y núcleos urbanas muy
desfavorecidas para que a la vida de estos infantes llegue el rayo de
luz de la solidaridad humana.
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