Wednesday, April 11, 2012

Omisión histórica

Omisión histórica
Miércoles, 11 de Abril de 2012 03:11
Escrito por Juan Linares Balmaseda

Cuba actualidad, Luyanó, La Habana, (PD) En la novela Lances de amor.
Vida y muerte del caballero Narciso, de Alfredo Antonio Fernández, se
entrelazan historia y ficción. Presenta al general Narciso López de
Urriola tal y como pudo haber sido en carne y hueso: un gallardo
patriota a la par del recalcitrante aventurero.narciso_lopez

La novela -premio Alejo Carpentier en 1993- deja ver los intereses
esclavistas que movieron la sociedad cubana de la primera mitad siglo
XIX. En buena medida, la obra estimula la curiosidad y el conocimiento
del lector, con la sabia lección de que no se puede entender el presente
y percibir el futuro sin estudiar el pasado.

El autor desarrolla la trama apartándose del esquematismo y enfoques
tendenciosos achacados al mártir, que nació en Caracas, Venezuela, en
1798, y que participó en la guerra de emancipación de la América
hispana, sirviendo al ejército español.

Perdida la guerra se refugia en Cuba en 1823. Cuatro años después pelea
en España durante la Primera Guerra Carlista y obtiene grados de
brigadier, luego general y finalmente gobernador de Valencia. Regresa a
Cuba en 1840, ejerciendo importantes cargos en la administración.
Conspira contra el poder colonial español y debe huir al vecino del
Norte. Allí funda un ferviente movimiento de anexión de Cuba a los
Estados Unidos de América. El 9 de mayo de 1850 desembarca por la bahía
de Cárdenas, al mando de unos seiscientos hombres, y por primera vez se
iza en suelo cubano la actual enseña nacional. Permanecen en la isla
cerca de un día, pero son atacados por una tropa mucho mayor, lo que los
fuerza a hacerse a la mar. El 12 de agosto de 1851 retorna a Cuba con el
mismo propósito anexionista, al mando de una tropa de alrededor de
cuatrocientos hombres. Cae prisionero y el 1º de septiembre, lo condenan
por alta traición y es ejecutado en el garrote vil.

Al leer la novela se me presentó una interrogante: ¿Cuántas escuelas con
el patronímico de su protagonista, Narciso López, hay en Cuba?

Por teléfono hice la pregunta a un funcionario del Ministerio de
Educación. Me respondió: "Debe haber alguna, por supuesto, pero no tengo
esa información". Y finalizó el diálogo con: "No es fácil. Habría que
buscar en los archivos de las escuelas primarias, secundarias,
preuniversitarias, tecnológicas y de oficios".

Prosiguiendo con mi indagación, me comuniqué con el servicio de
información a abonados de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba,
popularmente conocido por el 113. Del otro lado de la línea y en
cuestión de minutos, una mujer de trato amable despejó la incógnita: "No
existe ninguna escuela con ese nombre, señor".

"¡Nada con el nombre del promotor de la creación de la bandera cubana y
del escudo nacional!", resollé ante el auricular. Más la telefonista
persistió con sus revelaciones: "No señor. Y con tal nombre tampoco hay
empresas, ni fábricas, ni parques...nada".

¿Cómo ha podido omitirse a alguien tan importante en los fundamentos de
nuestra nacionalidad?
Para Cuba actualidad: jclb352000@yahoo.com

http://primaveradigital.org/primavera/cuba-cultura/literatura/3845-omision-historica.html

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